viernes, 28 de noviembre de 2008

Pensaba en la Teletón. Pensaba en la gente discapacitada. Pensaba en el sufrimiento de las familias. Pensaba en la tele prendida toda la noche. Pensaba en la plata. Pensaba que me da tanto miedo estarlo; o en su defecto, me gusta tanto ser capacitada. Pensaba que si alguna vez me pasa algo quisiera morir así no más, desangrada. Admiro la entereza, las fuerzas, las ganas, la perseverancia. Veo a la Daniela García y contrario a lo que debería sucederme, pienso que en su lugar yo hubiese elegido morir. Porque es más fácil. Porque es menos doloroso. Porque a pesar de que crea que la gente discapacitada tiene la misma dignidad que cualquier otro pelagato, no toleraría ver mi cuerpo regado en el piso.Estoy conciente que es supercial atribuirle dignidad a tu vida porque tienes piernas o porque tienes brazos. Incluso hay gente que tiene eso y más y aún asi me parece indigna. Es que para mi hay cosas más importantes que la vida. Y es cierto que pla dignidad de los discapacitados es igual a la de los morales, pero conmigo no lo aguantaría. Entera o muerta. Y es tanto mi miedo que me asusto al pensar que me puede pasar. Y tal vez por eso creo tanto en la eutanasia. Porque no vale si estas vivo y no eres capaz de disfrutar. Porque es imposible ser el mismo. Porque es imposible no volverte amargado y no alejarte de todos. porque quizás soy una egoísta y cobarde, pero eso no lo quiero vivir